Impulsar y garantizar el desarrollo y bienestar integral de los Pueblos Indígenas y Afromexicanos como sujetos de derecho público, en el marco de una nueva relación con el Estado mexicano, para el ejercicio efectivo de sus derechos, el aprovechamiento sostenible de sus tierras, territorios y recursos naturales, así como el fortalecimiento de sus autonomías, instituciones, culturas e identidades, mediante la implementación de procesos permanentes de diálogo, participación, consulta y acuerdo. Promover el reconocimiento, respeto y promoción de los derechos y el desarrollo de los pueblos indígenas y afrodescendientes, asegurando su participación activa en la vida política y social del país.